Cuatro hombres enfrentan acusaciones por un crimen con tintes mafiosos en Córdoba. Se les imputa el asesinato y tortura de Daniel Enrique Coria, bajo la supuesta orden y pago de un recluso condenado en Cruz del Eje.
Los acusados: Carlos Daniel «Manco» Figueroa, Héctor Oscar María «Pirilo» Figueroa y Michael Joel «Maicol» Figueroa habrían ejecutado el crimen, mientras que el presunto cerebro detrás es Pablo Mario «Pistola» Silva.
La fiscal Claudia Rita Palacios lidera la investigación y ha llevado el caso a juicio, alegando que todos los acusados son coautores del homicidio doblemente calificado, involucrándolos en un siniestro plan «por precio o promesa remuneratoria» y «con el concurso premeditado de dos o más personas».
Martín Ezequiel Silva también figura en el caso como partícipe secundario, ya que se cree que proporcionó apoyo logístico y gestionó el pago por los «servicios prestados».
A medida que se elevan las actuaciones a juicio, la pesquisa continúa en busca de posibles lazos con una organización delictiva más amplia y otros sospechosos involucrados en otros crímenes. Un oscuro panorama que la fiscalía de Palacios trata de desentrañar.

