Después de todo un día de trámites, apoyo con reclamos de protectoras de animales y la sociedad, el Senasa confirmó que el perro quedará en Argentina cumpliendo aislamiento durante 10 días para después restituirlo a sus dueños.
Franco Gavidia, que es un jugador de handball profesional, padeció desde que llegó al país la odisea para que su mascota, «Coco», no sea deportado a Hungría, que es el lugar desde donde provenía.
El perro no contaba con la documentación correspondiente y la vacuna de la rabia vencida, por lo que las autoridades aeroportuarias lo retuvieron al ingresar al país sin que pueda ser llevado al domicilio del deportista que lo traía.
Ante esta situación la disposición era que el animal fuera vacunado y devuelto a Hungría, lo que generó que su dueño comenzara a preocuparse por lo que sucedería con él y a buscar posibles soluciones.
En horas de la mañana Gavidia habló en varios medios de comunicación admitiendo que le faltaban documentos, pero que viajó rápido del país europeo por algunos rumores de que podría haber nuevas restricciones que le impedirían regresar pronto a la Argentina.
Lo que le estaba pasando a Coco y a su dueño rápidamente comenzó a viralizarse por redes sociales provocando la adhesión de muchas personas y organizaciones que comenzaron a reclamar #LiberenaCoco.
En las primeras horas de esta mañana el Senasa (Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria), informó que no podía «ingresar al país porque se pone en riesgo a la población que tome contacto con el mismo» y advirtió que la documentación debía ser aprobada por el país de origen del viaje por lo que el animal podía ser deportado.
Así, desde que llegó al aeropuerto de Ezeiza, el perro fue apartado de su dueño, puesto en aislamiento y bajo el control de la brigada canina.
Desde la mañana, en que Franco Gavidia comenzó a hablar del problema por redes sociales y medios de comunicación hasta esta tarde, el destino de «Coco» era incierto hasta que llegó un nuevo comunicado del Senasa, que trajo un poco de tranquilidad al dueño con su familia y a quienes se interesaron en saber lo que pasaría con él.
«Gracias al trabajo articulado con Aduana y el diálogo con el dueño de la mascota, se decidió que “Coco” cumpla con:10 días de cuarentena, sin ingreso al país, en instalaciones aduaneras. Ser vacunado contra la rabia», expresa el comunicado emitido por la entidad nacional.
Finalmente, si bien no estará hoy en su casa junto a la familia, «Coco» se quedará en Argentina cumpliendo con las normas definidas por el Senasa y en unos días podrá reencontrarse con Franco Gavidia que lo traía desde Hungría.